Es esta una obra de gran mérito por dos razones: de un lado, por la claridad, sencillez y concisión con que se exponen y hacen comprensibles al público general, no necesariamente versado en música, un conjunto de ideas que parte de la flamencología tradicional parece que sigue sin reconocer. Por otro lado, el autor, Gregorio Valderrama, estudioso incansable, apasionado bibliófilo y coleccionista de antiguas y rarísimas grabaciones de flamenco. La confluencia de estos singulares elementos ha posibilitado la realización de esta obra que, sin duda, está llamada a convertirse en una accesible, a la vez que inteligente y bien documentada, introducción al estudio del flamenco.